Palabra de Fútbol

Thursday, June 11, 2009

Bielsa

Todo ha resultado casi a la perfección. Llegaron estos nuevos dirigentes y construyeron sólidas bases institucionales. Planearon, disciplinaron, y ya. Contrataron a un entrenador de primer nivel. No escatimaron en gastos, facilitaron todas las condiciones y llegó Bielsa. Uno de verdad, no tanto porque sea un latero (como decía Felipe Bianchi), no tanto porque sea puro trabajo (como dicen todos esos periodistas deportivas aduladores del trabajo), sino porque le GUSTA EL FÚTBOL, pero de verdad. De eso se trata, de ponerle un poco de pasión a las cosas que uno hace. Ahora bien, de todo este gran proceso, lleno de buenas noticias y de buenos augurios, hay algo que ha cambiado radicalmente el panorama. El público de las graderias ya no es el mismo de antes. Y no lo digo con una nostalgia barata. Pero hay algo que es cierto. Los partidos de local en estas eliminatorias han sido absolutamente silentes: no hay bombos, no muchos ceacheí, no hay muchas canciones. En efecto, en el partido de ayer, el público sólo cantó tres veces al unísono: una para decir que los bolivianos no tienen mar, otra para dejar como bolivianos maricones a los que no saltaran y una última para decir que íbamos al mundial. ¿A qué se debe esto?

Ufffff. habría que hacer un estudio. Por ahora, aventuro algunas hipótesis:

Este es el público del chile de hoy, terriblemente amargado. Compra sus entradas por ticketmaster y ya no se deben hacer las colas afuera del estadio que había que hacer antes para conseguir una. Paga las entradas con la tarjeta presto, acumulando el costo debajito del plasma, de la lavadora nueva y de los pagos de un crédito vencido. Un público cansado, que cuando canta, lo hace para insultar al rival. Un público que ya no canta como antes, que llegaban cuatro horas antes para cantar mil y una veces.

Solución:
Que Bielsa se postule de candidato para las próximas elecciones. En la conferencia dijo que la mayor felicidad de chile no estaba en las alegrías deportivas, sino en el aumento de la calidad de la educación. Si Bielsa comenzara a decir que no le gustan algunas actitudes, lo seguiríamos de inmediato. Se acabarían los malos modales, la insensibilidad, cecería el PIB, habrñia mayor redistribución. No sería descabellado pedirle al congreso una nacionalización express y juntar 36.000 firmas en todas las notarías del territorio.

lo escribí un poco apurado, pero creo puede ser un buen primer paso.